Con el fin de preservar la seguridad alimentaria, la calidad del alimento y su vida útil en perfectas condiciones, la logística para transportar congelados debe cumplir unas normativas muy estrictas respecto a las temperaturas. Esto obliga a hacerlo con transporte refrigerado o los envases isotérmicos adecuados.
¿Por qué́ es importante el transporte de productos congelados?
Los alimentos congelados son un grupo especial de productos con unos requerimientos térmicos muy específicos. El transporte de congelados debe garantizar temperaturas a −18°C o inferiores. Se aseguran así varios factores:
- Cumplimento normativo. Tanto del Acuerdo ATP como de las distintas legislaciones de salud pública. El incumplimiento conlleva sanciones y una pérdida de reputación enorme.
- Seguridad alimentaria. A temperaturas bajo cero se eliminan muchos microorganismos patógenos. Otros, ralentizan su proliferación. De esta forma se reduce el riesgo de toxiinfecciones.
- Preservación de la calidad. Las bajas temperaturas inhiben diversas reacciones químicas y enzimáticas responsables del deterioro de los alimentos. De esta forma el envasador o fabricante garantiza que el alimento llega al consumidor con todas las propiedades organolépticas y nutricionales, así como con una presentación impecable.
- Prolongación de la vida útil del alimento. La congelación facilita la distribución de alimentos perecederos a clientes más distantes y por períodos más prolongados. En otras palabras: se amplía el mercado, incluida la exportación.
- Reducción de mermas. Vital para el balance del distribuidor y del minorista.
- Reducción del desperdicio alimentario. La normativa de Desperdicio Alimentario exige a toda la cadena de distribución alimentaria que cuente con las medidas necesarias para evitar que los alimentos se echen a perder.
La cadena de frío: clave para garantizar la calidad del transporte
La cadena de frío hace referencia al conjunto de procesos y procedimientos interconectados a lo largo de la cadena logística con el objetivo de mantener una temperatura controlada y constante.
Se aplica a aquellos alimentos sensibles al calor y debe mantenerse desde la producción o envasado hasta su consumo final. El transporte de productos congelados debe ser siempre a una temperatura de -18ºC o inferior.
Este marco de seguridad térmica pasa por varias fases:
- Producción y enfriamiento. Ya sea en alta mar (pescados), en la industria agrícola (frutas y verduras) o en la fábrica (para alimentos preparados), el producto se limpia, corta y/o precocina, y se baja su temperatura de forma inmediata.
- Almacenamiento. Conservación en cámaras frigoríficas o congeladores a, al menos, -18ºC o menos.
- Transporte. Mediante vehículos refrigerados o envases isotérmicos.
- Punto de venta. Almacenamiento en cámaras frigoríficas y exhibición en el lineal en muebles congeladores comerciales.
- Consumidor final. El ciudadano asume la responsabilidad de llevarlo a casa y guardarlo en el congelador en el menor tiempo posible y evitando que se descongele.

Tipos de productos congelados que requieren transporte especializado
Los alimentos congelados cada vez tienen una mayor presencia en nuestra alimentación.
- Alimentos que se consumen a temperaturas bajo cero: helados, tartas y cremas heladas y el propio hielo.
- Platos preparados y otras presentaciones listas para calentar o cocinar con facilidad (croquetas, calamares, lasañas, pizzas…)
- Productos frescos ultracongelados: verduras, frutas, carnes, pescados…
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Tipos de embalajes en el transporte de productos congelados
Envase primario
Estos alimentos suelen llevar un envase primario que facilita su comercialización al por menor y permite el etiquetado de información al consumidor que marca la normativa (generalmente, una bolsa, caja o tarrina). Suelen ser de plástico o cartón.
En el caso de los helados o las tartas heladas también se puede optar por un envase primario isotérmico, generalmente, de poliestireno expandido (EPS).
Envase secundario y terciario
También puede ser conveniente un envase secundario o terciario isotérmico que garantice que no se rompe la cadena de frío ni durante el transporte, ni durante la carga y descarga. Los embalajes de poliestireno expandido (EPS) son la solución isotérmica más eficiente, ligera y asequible.
Estos envases son habituales para envíos pequeños de ecommerce, o entregas de última milla, donde el vehículo principal puede no ser frigorífico. En este caso, los embalajes retornables de polipropileno expandido (EPP), como KOMEBAC®, son una solución isotérmica eficiente, sostenible y rentable a largo plazo ya que pueden reutilizarse en numerosos ciclos.
En Knauf Industries contamos con un amplio catálogo de soluciones estándar para el transporte de fríos y congelados. Nuestro ID Lab también puede desarrollar prototipos y fabricar embalajes personalizados con otras medidas, colores o necesidades (grabar el logotipo en el embalaje, etiquetado…).
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Normativas que rigen el transporte congelado de alimentos
ATP: Acuerdo sobre Transportes Internacionales de Mercancías Perecederas
La principal normativa es el Acuerdo sobre Transportes Internacionales de Mercancías Perecederas y sobre Vehículos especiales utilizados en estos transportes (ATP). Regula las condiciones que deben cumplir los vehículos refrigerados o, en su defecto, el envase isotérmico. También determina las temperaturas mínimas exigibles a los alimentos.
Es un acuerdo entre Estados, sin que exista una autoridad central que vigile su cumplimiento. En España esta responsabilidad de vigilancia y control del transporte de alimentos refrigerados recae en los ministerios de Transportes e Industria, las Comunidades Autónomas y los Organismos de Control Autorizado (OCA).
En caso de localizarse una partida de alimentos en mal estado en el punto de venta, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ordena, coordina y publicita su retirada.
Este Acuerdo se firma en 1970 y se actualiza en el BOE en 2013.
Real Decreto 1021/2022
La normativa para alimentos congelados básica en España es el Real Decreto 1021/2022 En su artículo 4 establece las temperaturas mínimas (Punto Crítico de Control) para los distintos productos alimenticios que deben mantenerse en el comercio al por menor.
Otras normativas para envases
En lo que respecta a los envases isotérmicos, deben cumplir las normas europeas de seguridad del material en contacto con el alimento y las que afectan al mantenimiento de la temperatura. Esto se contempla en el Reglamento 1935/2004 que determina que los materiales en contacto con alimentos deben ser inertes e indicar que son ‘aptos para para contacto con alimentos’ con el símbolo de la copa.
El Reglamento 10/2011 establece los materiales plásticos autorizados y los límites de migración de componentes del plástico al alimento a distintas temperaturas, incluida la congelación.
Finalmente, como el resto de envases, deben cumplir con el PPWR.
Buenas prácticas en el transporte de alimentos congelados
Así como el vehículo de transporte debe cumplir unas exigencias para preservar la cadena de frío, el envase isotérmico debe estar fabricado de forma que cumpla de forma eficiente su función de barrera térmica. En este caso, para minimizar el intercambio de calor con el exterior.
- Materiales. Los más comunes son el poliestireno expandido y las cajas con revestimientos aislantes. En Knauf Industries hemos desarrollado otros dos materiales alternativos al EPS y con un mejor perfil ambiental: CELOOPS®, de origen reciclado, y NEOPS®, de origen vegetal.
- Aislamiento térmico. El envase debe contar con la densidad adecuada para soportar la duración del envío y las condiciones ambientales externas.
- Cierre y/o sellado. El envase debe cerrarse de forma hermética para evitar la entrada de aire caliente y la pérdida de temperatura.
Preguntas frecuentes sobre transportar alimentos congelados
Los envases que ofrecen mayores garantías de preservación de la cadena de frío, y, por tanto, de la seguridad alimentaria son los envases de poliestireno expandido (EPS).
En Knauf Industries hemos desarrollado, además, dos alternativas de materiales circulares con las mismas prestaciones que el EPS, pero una menor huella de carbono. Son CELOOPS®, de origen reciclado, y NEOPS®, fabricado a partir de biomasa vegetal no agrícola.
El transporte refrigerado es la opción logística ideal para grandes portes. Sin embargo, el transporte de alimentos congelados en envases isotérmicos es una alternativa habitual para el ecommerce y la última milla, donde el vehículo principal puede no ser frigorífico por las restricciones de acceso al centro de las ciudades.
Los vehículos de transporte, o, en su defecto, el envase isotérmico, deben cumplir con lo previsto en el ATP y el RD 1021/2022. Además, deben someterse a las auditorías de Calidad y Seguridad Alimentaria voluntarias que requiera el cliente, en especial, respecto al Análisis de Peligros y Puntos de Control Crítico (APPCC).
Los envases, en especial los que están en contacto con alimentos, deben cumplir con las normativas sobre materiales autorizados. Finalmente, en los próximos años deberán adecuarse a lo especificado en el Reglamento de Envases y Residuos de Envases (PPWR).
Sí, pero la logística de congelados a escala internacional debe ser impecable. No solo debes garantizar la cadena de frío (ATP), sino también la conformidad del producto y la documentación sanitaria exigida por el país de destino. Gracias a las mejoras técnicas en vehículos y envases el transporte congelado internacional cada vez es más relevante.
La temperatura durante el transporte de alimentos congelados se controla mediante una combinación de equipos técnicos especializados y protocolos de monitoreo rigurosos. El objetivo principal es garantizar el registro continuo e inalterable de la temperatura.


