Abrir, calentar (solo si el consumidor lo ve necesario) y comer. Así de fácil de entender es la V gama. Que levante la mano quien no haya comprado alguna vez una lasaña, una ensaladilla rusa o la imprescindible tortilla de patatas lista para hincar el diente.
Son alimentos previamente cocinados, envasados y listos para comer en los que el packaging juega un rol fundamental. Debe mostrar el producto apetecible, conservarlo con garantías y abrirse con facilidad.
En muchos casos requieren que el consumidor final los caliente a su gusto. En este caso, además, conviene que el envase sea apto para el microondas.
Sin olvidar la sostenibilidad: tiene que ser reciclable. Veremos que hay muchas alternativas de envases para comidas, pero no todos cumplen por igual las expectativas del productor, ni las del consumidor final.

¿Qué son los alimentos de quinta gama?
Los alimentos de quinta gama son aquellos preparados y envasados para que el consumidor solo tenga que abrir, calentar si fuera necesario, y consumir.
Aunque quinta gama es la denominación formal dentro del sector horeca, el ciudadano de a pie los conoce comúnmente como ‘platos preparados ya envasados’.
Para garantizar su seguridad se someten a distintos procesos industriales que eliminan o neutralizan los microrganismos patógenos, como la pasteurización.

Productos de cuarta gama y quinta gama: diferencias
Los alimentos de 4ª gama son frutas y verduras cortadas y envasadas al vacío o en atmosfera modificada. Los de 5ª gama son alimentos procesados que se envasan y someten a un proceso de esterilización.
De 4ª gama son las bolsas de ensalada lavada o la piña fresca en rodajas. Se comercializan bajo cadena de frío y su vida útil suele estar entre los 7 y 10 días.
La 5ª gama incluye la tortilla de patatas, platos de albóndigas o de bacalao con tomate cocinados, envasados, esterilizados y refrigerados. Casi siempre requieren calentar antes de consumir.
Su vida útil oscila entre los 6 y 42 días, según el alimento y del tratamiento de conservación aplicado.
También pertenecen a este grupo los ingredientes de la ‘cocina de ensamblaje’. Son preparaciones intermedias que ahorran pasos en la cocina y preservan la seguridad alimentaria, como el huevo líquido pasteurizado. Los envases de última milla (delivery, take away..) no son estrictamente quinta gama, pero estos envases para platos preparados comparten muchas características con ellos en cuanto a transporte y recalentamiento en casa.
La sociedad actual vive una curiosa paradoja: no tiene tiempo (a veces, tampoco ganas) de cocinar, pero desea comer la comida de siempre. Por eso la quinta gama es uno de los sectores en expansión en la industria alimentaria.
Características de los envases para alimentos de quinta gama
Son productos delicados cuyo packaging debe cumplir varios requisitos:
- Prolongar la calidad organoléptica. Que el producto sepa, huela y tenga la misma textura (o casi idéntica) que recién preparado.
- Garantizar la seguridad alimentaria. Evitar toxoinfecciones por microorganismos patógenos o contaminaciones cruzadas.
- Presentar y valorizar. En el lineal de supermercado tiene que verse apetecible. Muchas de estas compras son impulsivas y entran por los ojos (el típico sushi para cenas improvisadas).
- Evitar el desperdicio alimentario. Si no se cumplen las condiciones anteriores, el alimento acaba en la basura.
- Facilidad de uso. La clave del éxito está en el ‘ready to eat’. Tanto mejor si, además, los alimentos se pueden calentaren sus envases (microondables u horneables).
- Circulares. Al ser envases de un solo uso, es prioritario optar por materiales reciclables, compostables o biodegradables, o envases reutilizables o retornables.
- Identidad de marca. El envase comunica. Aprovecha para incorporar los colores de tu marca, el logotipo…
Tipos de envases de quinta gama y delivery
Existe una enorme variedad de envases para quinta gama, así como de envases de última milla para platos preparados.
Entre los envases para platos preparados y take away encontramos los fabricados en plástico (de origen fósil o bioplásticos), cartón, aluminio o madera (bambú…).
Optar por uno u otro depende de las características del producto, del tipo de distribución (en la sección de refrigerados del supermercado, take away, delivery…), de la estrategia de marketing y de la importancia que se dé a la sostenibilidad.

Plástico
El más utilizado. Pueden ser monomateriales, normalmente, polipropileno (PP) o polietileno tereftalato (PET), y en menor medida, de poliestireno (PS) o policloruro de polivinilo (PVC). También los hay multicapa (PET/PE/EVOH/PE).
Cuantos más materiales intervengan en un envase, más difícil será su reciclaje.
Actualmente se investiga en nuevos monomateriales plásticos con las mismas prestaciones que el procedente del crudo virgen, pero obtenidos de fuentes circulares.
Es el caso del R’KAP®, un monomaterial procedente plásticos reciclados químicamente de postconsumo y con las mismas propiedades que el PP. Esto lo convierte en apto para microondas.
Existen muchas dudas sobre si se pueden calentar alimentos en envases de plástico. En especial, si se pueden meter en el microondas.
Solo los envases de PP (y R’KAP®) garantizan un calentado en microondas con total inocuidad. Con el resto de plásticos no hay certeza de que no haya transferencia de sustancias potencialmente nocivas, aunque se usen apenas un minuto.
En cuanto a reutilizar los envases de plásticos para quinta gama dependerá de su resistencia a los golpes o rayaduras. Los envases rígidos de PP de comida para llevar con tapa sí permiten la reutilización como táper (por ejemplo, los de comida china).

Cartón
Este material es reciclable y el consumidor lo percibe generalmente como más sostenible que el plástico. No debe meterse en el microondas ya que el calor despega los adhesivos.
Madera
Bambú y otros materiales arbóreos se presentan como alternativas sostenibles al plástico. No vale para el microondas.

Aluminio
Las barquetas de aluminio son habituales en productos como el pollo asado. Mantienen bien las cualidades organolépticas del alimento, pero no pueden meterse en el microondas.
Impermeable | Resistencia al calor/HPP | Ligereza | Precio | Reciclaje/ Compostaje | Apto para microondas/horno | |
PP | *** | *** | *** | *** | *** | *** |
PET | *** | * | ** | *** | *** | NO |
Multicapa con EVOH | *** | *** | ** | ** | * | Según material |
Plásticos biodegradables | *** | *** | ** | * | *** | Según material |
Cartón | * | * | ** | *** | *** | NO |
Madera | NO | * | * | * | * | NO |
Aluminio | *** | ** | *** | ** | * | NO |
Envases termoformados para alimentos
El termoformado es una técnica de fabricación por moldeo en la que se calienta una lámina de plástico y se le da la forma deseada para crear envases semirrígidos.
Los envases termoformados para alimentos de quinta gama se diseñan teniendo las características del plato y los procesos culinarios o de conservación pertinentes: atmósferas modificadas, pasteurización, estanqueidad y/o recalentamiento posterior.
Deben ser inertes e impermeables, aislar térmicamente y soportar temperaturas de pasteurización, refrigeración y recalentado. También, resistir golpes y deformaciones.
En Knauf Industries contamos con cuatro materiales propios para envases de plástico para termoformados para quinta gama:
- KAPSEAL®. Fabricado enPP, permite conservación bajo atmósfera modificada. Ofrece gran calidad de sellado, es apto para pasteurización y termosellado, y se puede introducir en microondas. Además, es 100% reciclable. Ha sido aprobado por ADIV (Centro tecnológico francés especializado en el sector cárnico y de platos preparados).
- KAPCLEAR®. Monomaterial transparente, 100% reciclable. Apto para pasteurización y microondas.
- KAPLIGHT®. Fabricado el PP negro libre de carbono. Es el primer monomaterial oscuro para termoformados detectable por los sistemas de clasificación automática de reciclaje.
- R’KAP®. Monomaterial procedente de plástico reciclado postconsumo y apto para uso alimentario. Tiene las mismas prestaciones que el PP, es decir, es apto para el microondas, pasteurizable y con excelente calidad de sellado. Dispone del Certificado por la International Sustainability & Carbon Certification Plus (ISCC Plus), según el método Mass Balance.


Conoce nuestros envases termoformados
Las barquetas KARY® son la respuesta de Knauf Industries para los termoformados de quinta gama. Presenta gran resistencia de soldadura a 1800 y permite un termosellado regular y plano para evitar fugas inesperadas durante su transporte o manipulación.
Te presentamos algunas de ellas:
- Kary Peal® Es la gama estándar. Todas se pueden fabricar en KAPSEAL®, KAPCLEAR® y R’KAP®.
- Kary Peal Pure Line® Con paredes lisas que permiten multiplicidad de colores a la hora de personalizar. Es el formato ideal para skin.
- · Skin Board Neo® Bandeja personalizable en color y en textura. Puede exponerse en vertical y sirve de soporte para servir el alimento directamente en la mesa.
Envases de plástico termoformados para platos preparados
Nuestros cuatro materiales de plástico para termoformados ofrecen excelentes prestaciones para platos preparados.


Personalización de los envases
En un restaurante, la imagen de marca la ponen la decoración, el menaje y el servicio en mesa. En un plato preparado casi todo se juega a una sola carta: el packaging.
Ya sabemos que ‘la comida entra por los ojos’. Puedes seducir a tu cliente con un envase atractivo, práctico y donde la marca sea bien visible para facilitar su recuerdo. Una forma habitual son los logos grabados en bajorrelieve.
En los últimos años el Design Thinking permite mejorar la experiencia de usuario gracias a packaging con multicompartimentos, como las bento box, para separar las salsas o los distritos componentes.
Asimismo, las estrategias de ecodiseño hacen posible lograr envases eficientes desde una perspectiva medioambiental.
Aligerar los envases para reducir su huella de carbono, emplear monomateriales, eliminar elementos innecesarios que dificulten el reciclaje o usar plásticos reciclados (rPET, rEPS) o de origen vegetal (NEOPS®) son algunas de esas estrategias.
El reciclado químico abre enormes posibilidades para la circularidad de los envases. Sin ir más lejos, con el reciclado mecánico solo el PET de las botellas de agua se convierte en rPET de uso alimentario. Con el reciclado químico se podrá con todos los envases.
En Knauf Industries contamos con un equipo de diseño con gran experiencia que seguro dará con la alternativa más impactante, económica y sostenible para tus productos.
Reciclaje de los envases de platos preparados
El imparable crecimiento de los platos preparados genera una gran cantidad de residuos por la utilización de envases de un solo uso.
Aunque los consumidores cada vez están más comprometidos con la economía circular, no siempre tienen claro cómo y dónde reciclar cada uno de los componentes del packaging de su chili con carne o sus tallarines con gambas.
Los envases o componentes de cartón se deben depositar en el contenedor azul para su reciclado.
Los de madera, en el marrón de restos orgánicos. Desafortunadamente, este tipo de contenedores aún no está disponible en todos los municipios.
En cuanto a los plásticos, según su origen y características, se depositarán en el contenedor amarillo o el marrón, si son compostables o biodegradables.
Lo que los consumidores suelen desconocer es que cada tipo de plástico se recicla de forma diferente y por separado. Por eso, desde el punto de vista de la sostenibilidad, se prefieren los envases monomaterial.
Los avances en tecnologías de separación ‘limpia’, entre ellas, el reciclado químico, solventarían este escollo al reducir los materiales plásticos a meros monómeros.
Es importante recalcar que, cuando un envase es reciclable, pero está manchado, se deberían eliminar los residuos de alimentos, vaciando bien el recipiente y hasta enjuagándolo. Un gesto que evita posibles descartes en las plantas de reciclado.

Circularidad e impuesto al plástico
El enero de 2023 entrará en vigor la Ley 7/2022, de 8 de abril, de residuos y suelos contaminados para una economía circular (LRSC). Este texto legal contempla el famoso ‘impuesto al plástico’ que gravará con 0,45 euros cada kilo de plástico no reciclado.
El objetivo es dinamizar la economía circular y estimular el reciclaje, penalizando aquellos usos que recurran a material virgen.
Al ser un material procedente de plástico 100% reciclado, R’KAP® es la solución idónea para termoformados que estará exenta de ese impuesto.
Los alimentos de quinta gama son aquellos preparados y envasados para que el consumidor solo tenga que abrir, calentar si fuera necesario, y consumir.
Los alimentos de 4ª gama son frutas y verduras cortadas y envasadas al vacío o en atmosfera controlada. Los de 5ª gama son alimentos procesados que se envasan y someten a un proceso de esterilización.
Solo los envases de PP (y R’KAP®) garantizan un calentado en microondas con total inocuidad. Con el resto de plásticos no hay certeza de que no haya transferencia de sustancias potencialmente nocivas, aunque se usen apenas un minuto.
La capacidad de reutilización posterior de un envase de quinta gama dependerá de su resistencia a los golpes o rayaduras. Los envases rígidos de PP de comida para llevar con tapa sí permiten la reutilización como táper (por ejemplo, los de comida china).
Entre los envases para platos preparados encontramos los fabricados en plástico (de origen fósil o bioplásticos), cartón y madera (bambú…).
Es importante recalcar que, cuando un envase es reciclable, pero está manchado, se deberían eliminar los residuos de alimentos, vaciando bien el recipiente y hasta enjuagándolo. Así se evitar posibles descartes en las plantas de reciclado.